lunes, 26 de mayo de 2014

Despierta feliz

Solemos tener la creencia que tenemos un cuerpo y que vivimos en este mundo y no es así. No tenemos un cuerpo, somos un cuerpo, no vivimos en este mundo, somos parte de este mundo. Vivimos en una era que le ha dado mayor relevancia a la razón que al cuerpo y la emoción. Nos estamos olvidando de conversar con nuestro propio cuerpo y en aprender a reconocer y valorar nuestras propias emociones. Solemos despertarnos por la mañana e inmediatamente empezamos a pensar: “¿Qué voy a hacer el día de hoy?”,”¿Qué voy a cocinar?”,”¿A quién voy a visitar?”, “Cuanto trabajo me queda pendiente de hacer?”, descuidando el conectarnos con nuestro cuerpo y con nuestras emociones, darle gracias a la vida “¡POR QUE ESTÁS VIVO¡”, porque tienes hoy una página en blanco por escribir y porque de ti únicamente depende llenarla de felicidad. ¿Alguna vez te has quedado contemplando a tu pareja mientras duerme por las mañanas?¿La sueles despertar con un beso o alguna caricia en su cabello?¿Te das tiempo para estirarte, conectarte con tu respiración, escuchar el sonido de los pájaros o respirar el aire puro por las mañanas?.

Te doy un consejo, si tienes un despertador, no le pongas una tonada cualquiera, graba a un ser querido que te diga cuanto te quiere, tu esposa, tu hijo, tu madre. Grábate tú diciendo que hoy va a ser un buen día y que eres una persona especial. Necesitamos programar a nuestro cerebro en positivo, dejar de lado nuestros temores, despedir nuestras creencias limitantes con cariño y decirles: gracias por haberme defendido, pero ya puedo caminar solo y sin temores.

¿Sabes qué es lo más importante de la vida?, precisamente que estás vivo y no es poco, es un milagro que estés vivo. De 100 millones de espermatozoides solo uno pudo fecundar y ese precisamente eres tú. ¿Sabes de donde viene la riqueza?. No, no viene del dinero, como dice un conocida frase “era una persona tan pobre que lo único que tenía era dinero”. La riqueza no viene de lo que tienes sino de lo que eres, no viene de cuantos bienes acumulas sino con cuanta felicidad vives y cuanto disfrutas de la vida con los pocos o muchos bienes que tienes.


Alégrate, hoy puedes ser feliz, si alguna vez has sido feliz es porque tu cuerpo, tu mente, tu espíritu y tus emociones también pueden ser programadas para serlo. No te equivoques, hoy puedes ser feliz. 

Buenos días